INDICACIONES Y BENEFICIOS DE SHIATSU

Indicaciones de Shiatsu:
· Estrés, ansiedad, agitación, nerviosismo
· Dolores de cabeza: cefaleas, migrañas
· Dolores de espalda, lumbalgias, ciática, tortícolis, cervicales
· Trastornos gastrointestinales
· Desordenes menstruales
· Trastornos ligados a la menopausia
· Insomnio
· Fatiga crónica
· Agotamiento físico
· Depresión

Beneficios de Shiatsu:
· Mejora el funcionamiento general del organismo
· Aumenta el rendimiento físico e intelectual
· Eleva el tono vital
· Libera tensiones
. Estimula la circulación de líquidos corporales, sistema linfático y hormonal y la eliminación de toxinas
· Equilibra el sistema nervioso
· Equilibra el sistema respiratorio
· Elimina el estrés tanto físico como emocional
· Favorece la circulación sanguínea (vitaliza la piel y disminuye la aparición de arrugas)
· Mejora la digestión
· Tonifica los músculos, articulaciones y tendones
· Produce una profunda relajación que beneficia el estado psicoanímico

EFECTOS DEL SHIATSU

Los efectos de Shiatsu son más amplios y complejos que los del masaje convencional, pues además de calmar tensiones y dolores musculares, estimula el flujo de las energias vitales y ayuda a que el paciente restaure el equilibrio entre cuerpo y mente, y en un estado de armonia natural, reactiva su capacidad de autocuración.



El Shiatsu ve las enfermedades como la consecuencia de un desequilibrio interno, por eso trata todo el cuerpo. El profesional de Shiatsu sabe que, a veces, la causa del dolor no se encuentra donde éste se manifiesta, y un tratamiento localizado puede tener tan solo un efecto temporal. Así el Shiatsu trata todo el cuerpo para eliminar, además del efecto, el origen de muchas molestias.


En las palabras del gran Maestro Tokujiro Namikoshi, fundador de esta terapia en Japón “Shiatsu es como el amor de una madre, la presión sobre el cuerpo estimula la fuente de la vida”.


Alivia las tensiones musculares; calma la mente;alivia dolores articulares; produce tranquilidad, paz interior y sensación de contención.

¡QUIÉN PUDIERA ROBAR LA LUNA...!


El maestro Zen, Ryokan, llevaba una vida sencillísima en una pequeña cabaña al pie de la montaña. Una noche, estando fuera el maestro, irrumpió un ladrón en la cabaña y se llevó un chasco al descubrir que no había allí nada que robar.
Cuando regresó Ryokan, sorprendió al ladrón. «Te has tomado muchas molestias para visitarme», le dijo al ratero.
«No deberías marcharte con las manos vacías. Por favor, llévate como regalo mis vestidos y mi manta».
Completamente desconcertado, el ladrón tomó las ropas y se largó.
Ryokan se sentó desnudo y se puso a mirar la luna. «Pobre hombre», pensó para sí mismo, «me habría gustado poder regalarle la maravillosa luz de la luna».

SHIATSU: UNA TERAPIA ENERGÉTICA

Shiatsu significa literalmente “presión con los dedos”, Shi-dedo, atsu-presión. Esta presión se ejerce con los dedos pulgares y las palmas de las manos.
El Shiatsu es un masaje terapéutico japonés que, a través de sus presiones, estimula las defensas naturales del cuerpo facilitando la autocuración. Se desarrolló en el Japón a principios del siglo XX y fue reconocido oficialmente en el año 1930.

El Shiatsu en sus fundamentos, combina conocimientos de anatomía y fisiología occidentales con las bases fisiológicas filosóficas de la Medicina Tradicional China. Estas presiones se efectúan sobre unos canales de energía que recorren toda la superficie corporal y que se denominan meridianos. Ellos son como redes que vinculan distintas partes del cuerpo entre sí, y en ciertos lugares se profundizan llevando la energía que transportan hacia los órganos y sistemas orgánicos uniendo, por así decirlo, la superficie del cuerpo con el interior del mismo. De esta manera el Shiatsu, actuando sobre la piel y los músculos, puede influir en el funcionamiento de los órganos. Por el tipo de presiones que se usan, el Shiatsu estimula el Sistema Nervioso Parasimpático, que es el sistema relajante del cuerpo y que activa el sistema inmunológico movilizando las defensas y otorgando una sensación de bienestar.
El Shiatsu es un tratamiento integral y holístico. Cada vez que se realiza un tratamiento se trabaja todo el cuerpo debido a que el tratamiento local, generalmente, tiene efectos temporales sobre los síntomas y no llega a curar la causa.

Recibido con regularidad, tiene un efecto preventivo y sirve de mantenimiento una vez conseguido el reequilibrio, ya que al trabajarse todo el cuerpo, no sólo se trata el problema sino también su causa. El mecanismo de autocuración innato que poseemos es activado mediante la aplicación de esta técnica cuya efectividad será más o menos rápida dependiendo del estado de cada paciente, de su edad, de sus hábitos y de su confianza en el tratamiento.

El Ministerio de sanidad de Japón define el Shiatsu como:
“Tratamiento que, aplicando unas presiones con los dedos y las palmas de las manos, sobre determinados puntos, corrige irregularidades, mantiene y mejora la salud, contribuye a aliviar ciertas enfermedades (molestias, dolores, estrés, trastornos nerviosos, etc.) activando así mismo la capacidad de autocuración del cuerpo humano. No tiene efectos secundarios.”